La reunión mantenida por el grupo el martes 4 dejó las cosas claras, no solo íbamos a trabajar para enseñar a construir y darles las herramientas para que mejoren sus condiciones de habitabilidad, nos propusimos hacer que la gente sea más feliz, a medio y largo plazo nuestro trabajo mejorará su situación, pero ¿A corto plazo? Concluimos que debíamos pasar todavía más tiempo con la gente del asentamiento y creamos un horario para la siguiente semana en la que alternaríamos las últimas entrevistas del análisis con películas proyectadas diversos días, una jornada en la que compartiríamos comida española con ellos e ir a la escuela un par de mañanas para que, a través de juegos y conversaciones con la profesora, pudiéramos sacar las ideas de esa futura escuela de los que más saben de escuelas, su pequeños usuarios.
Por supuesto, no dejamos de lado la preparación del workshop con los estudiantes (semana del 17 al 22),el análisis climático y las recomendaciones de mejora, la gestión/comprensión/análisis de toda la información generada, y todo el trabajo que ello implica. Sin dejar de mirar de reojo la campaña de micromecenazgo.
Se estableció que cada día, justo después de desayunar, haríamos repaso de lo hecho anteriormente y definiríamos y dividiríamos las tareas de cada uno para ese día.
Esa misma tarde, con el trabajo dividido. Mientras Jose y Bharathi iban a reunirse con Shashi para hablar y redefinir su papel en el proyecto. Pau y Patri definían el Cronograma del workshop y Beto, Iván y Sarai trabajaban a fondo con el Climate Consultant sacando las recomendaciones necesarias para este clima. Divya y yo fuimos a Thanisandra para continuar con las entrevistas, ya a punto de finalizar el análisis social preguntando a todas las familias y para informarles de que al día siguiente, proyectaríamos una película allí, invitándoles a todos a verla. Todo el mundo con el que hablamos o nos saludamos en el asentamiento, se preguntó quién era esa nueva chica que hablaba tan bien telugu y kannada que me acompañaba en las conversaciones y donde estaba mi habitual compañera. (Divya es la prima-hermana de Bharathi)
05/02→ El trabajo continuaba, y al día siguiente pusimos la primera película en el asentamiento. Tiempos modernos fue todo un éxito, niños y mayores lo pasaron genial y creo que no pudo haber más risas. Una de las casas de cemento nos prestó la electricidad y una de sus paredes que usamos como pantalla. El único problema fue el intento de parar la película de un chico que vive cerca y es amiguete de borracheras del propietario. En un ataque de macho alfa debido a la borrachera que llevaba encima, mezclado con un malentendido al llegar, (Bharathi entre prisas y montajes del proyector y los altavoces, no le saludó como de costumbre) intentó que se parara la película entre voces pidiendo una explicación por no haberle consultado y preguntado antes de proyectar la película. Bueno, sin darle más importancia, le dimos la razón como a los…borrachos y conseguimos que se calmara, a pesar de no entender el porqué de sus actos, ya que no es nadie al que le tengamos que pedir permiso para nada, pero bueno, lo importante era que la peli continuara.
06/02→ Día ajetreado, por la mañana, después de la rutinaria reunión matutina, mientras los demás trabajaban en todo lo explicado al principio Bharathi, Jose y yo fuimos a reunirnos con Bosco para explicarle el pequeño problema que tuvimos durante el visionado de la película y ver como abordábamos la construcción de una tienda como paso previo a la construcción de la nueva escuela.
Nuestra intención era construir una tienda temporal junto a la actual escuela para aprender de ellos, de los que de verdad saben construir este tipo de estructuras de bambú y/o madera, para seguir aprendiendo como se construye de manera más práctica, algo que nos ayudará a la hora de proponer las mejoras y a la hora de construir la futura escuela. Pretendemos usar los materiales de la nueva construcción temporal y de la actual escuela en la nueva escuela. Para esto necesitábamos los materiales y consideramos que la colaboración por parte de Grace podría ir encaminada a conseguirlos y/o pagarlos, ya que la futura escuela estará llevada por ellos.
La posibilidad de que Grace pague los materiales no parece que sea posible, pero sí que están dispuestos a proporcionar los materiales que podamos utilizar en la construcción que encontremos en sus Centros de Recogida de Basura Seca (DWCC). Así que inmediatamente después Jose y servidor fuimos al centro de Grace llamado HBR Layout/Nagawara, el más grande de los centros de Grace y el más próximo al asentamiento. Allí, con Bosco y el comerciante que lo gestiona vimos que materiales podríamos utilizar, algunos maderos y un buen listón de aluminio, pero lo más interesante fue que abrimos otro posible frente en el que trabajar, justo detrás del centro, hay una inmensa escombrera no planeada, y creemos que tiene mucho potencial, podemos sacar mucho material a coste 0, bloques de hormigón, ladrillos, baldosas, arena y quien sabe que más completamente reutilizables.
Por ahora, a la hora de hacer el perímetro que evita la entrada de agua de lluvia en las viviendas tienda y algún que otro muro más que va a albergar la pizarras los vamos a hacer con esos materiales, pero no queremos que se quede solo en eso, está abierta la idea de generar un sistema de reutilización de materiales ¿Si los recolectores con los que trabajamos convierten ciertos materiales extraídos de la basura en materiales para hacer nuevos productos, por que no hacer lo mismo con este tipo de materiales?
Hablamos con Ramana por teléfono y quedamos en que nos veríamos junto con él y Bosco a las 6pm en el asentamiento, ya que parecía que ahora no estaba dispuesto a dejarnos construir nada nuevo en el lugar y teníamos que hablar. Esa misma tarde nos encontramos a un Ramana borracho que solo tenía fuerzas para escuchar, a pesar de no saber lo que entendió y dudar que recordara algo al día siguiente, los sucesivos días ha estado muy amigable y permisivo.
También aprovechamos para tener una charla con el chico que nos la intentó liar el día anterior, aunque le pidió perdón a Bharathi, seguía en sus trece y solo hablaba sin escuchar hasta que le dejamos las cosas claras, al parecer el trasfondo de todo esto era que creían que somos cristianos y que todo lo que estamos haciendo es para evangelizar, ya que trabajamos junto a Grace, una ONG Cristiana, aclarado que no estamos allí por otro motivo que no sea ayudar (palabras compartidas con Bosco) y que nuestro proyecto no entiende de religiones y nuestro equipo no es religioso, las cosas fueron mucho mejor. Resulta que uno de los amiguetes del chico conflictivo tiene una empresa de construcción y explicando un poco sobre el proyecto, salió motivadísimo y con ganas de ayudar con algo, Bosco quedó en que se mantendría en contacto directo con él para colaborar.
Aquí nos dimos cuenta del papel útil que desempeña Bosco en nuestro proyecto, hizo de excelente mediador (tiene muy buena oratoria) tanto con Ramana como con los otros 3 chicos, papel que Bharathi, a pesar de conocer la lengua, no puede asumir por su condición de mujer y la falta de respeto en comparación con un hombre que ello conlleva. Triste y cierto. Avisamos a la gente de la próxima película para el día siguiente.
Por la noche, después de la visita a Thanisandra y al volver a casa, pusimos una película en el barrio, nos apetecía también proyectarle una peli a la gente con la que todos los días compartimos nuestra callejuela y la calle mediana, La película era Dessert Flower, una inspiradora película sobre la superación de una mujer somalí que denuncia la ablación, bueno, con gran expectación, montamos el proyector y los altavoces mirando a la mejor pared/pantalla que encontramos y mucha gente vino a disfrutar de nuestro “cine en la calle”, hasta aquí, a pesar de que se nos fue el tiempo y empezamos muy tarde, todo bien, los problemas empezaron cuando aparecieron algunas escenas de mujeres desnudas en toalla recién salidas de la ducha y otras de sexo durante unos segundos. Todo el mundo se escandalizó y los gritos de un hombre para que pasáramos a cámara rápida la escena se convirtieron en desaprobaciones por muchas de las mujeres, vergüenza por partes de las adolescentes, y alteración general, que desembocó en un apagón (si, a lo Canal Nou) por parte de la casa que nos suministraba la electricidad. La peli acabó de golpe y toda la gente se fue molesta a su casa comentado que era “a very bad film”, mientras nosotros recogíamos el equipo y pedíamos disculpas.
Esta situación, sin ninguna duda, mostraba hasta qué punto es tabú, ya no solo el sexo, el erotismo en la sociedad, algo que notamos los dos días siguientes, los saludos por las mañana o al vernos en la callejuela no eran los mismos, las sonrisas eran menos sonrisas, las miradas más juzgantes y menos curiosas o admiradoras.
Al día siguiente, ya siendo viernes 7 En la reunión por la mañana perfilamos más a fondo el horario y contenido del workshop y poco después fuimos a visitar el templo hindú cercano a casa junto con Divya y Susmitha. Hablemos de templos.
La mayor parte del grupo se fue a Anantapur a eso de las 4pm, a visitar a una Fundación a la que tenemos mucho respeto y de la que queremos aprender, a la par de colaborar con ellos, la Fundación Vicente Ferrer. Junto con nuestros amigos Salva y Gloria (enlace al post de navidad) y más amigos suyos, se organizó un viaje para conocer la fundación, y nosotros aprovechamos para reunirnos con su Departamento de Arquitectura para hablar de esa posible colaboración que ya llevábamos unos cuantos mails gestando a través de Paula. Patri y Paula salieron muy contentas de la reunión…pero todo esto, ya os lo contarán ellas en otra publicación que pronto llegará.
Nos quedamos, Jose, Bharathi y yo, y por la tarde fuimos a Thanisandra y pusimos otra película de Charlie Chaplin, al llegar descubrimos que a raíz de la primera película, la gente nos recibió con mucha alegría y llenos de sonrisas “caemos más bien todavía” la primera película les gustó muchísimo (de hecho, cuando el día anterior les avisamos de que íbamos a poner otra película, nos dijeron que si era la misma, estaría muy bien, ya que les gustó mucho) y ya empiezan a convencerse de que vamos en serio con ellos.
Por mi parte, a Bharathi y a mí ya nos conocen de tantas veces que hemos ido y tenemos cierta confianza, pero a raíz de las películas, han aceptado al grupo y tienen mucha confianza en él.
El sábado fue tranquilo, Jose, Bharathi y yo nos dedicamos a adecentar un poco la casa, fuimos a vender el cartón que nos sobró después de hacer los muebles necesarios para vivir y trabajar la semana anterior. Independientemente de la cantidad que recibimos por la venta, le dimos un buen uso tanto al cartón, como a las botellas/botes de plástico y vidrio acumuladas en casa, ya que acabaron siendo recicladas sin pasar por la basura ni haber vivido durante algún tiempo en alguno de los miles de pequeños vertederos urbanos que hay por la ciudad antes de ser rescatados por un recolector, en el mejor de los casos.
Fue un día extraño, en el Jose y Bharathi cocinaron tortilla de patatas con la intención de practicar, ya que al día siguiente cocinaríamos en el asentamiento. Por la tarde, aprovechando que había mucha gente en la callejuela y queriendo pedir disculpas por el incidente, bajé a conversar con todo aquel que pudiera para disculparme en nombre de todos y para anunciarles que esa misma tarde-noche proyectaríamos otra película, recibieron muy bien las disculpas y sin darme cuenta se me pasaron dos horas entre charlas, juegos con las niñas y niños y ayudar a Bharathi a acarrear agua de la fuente cercana en la calle mediana hasta el tanque, cántaro a cántaro, movimos 300 litros entre juegos con los niños, bromas con las demás mujeres que también cargaban agua y anuncios de que en un rato íbamos a proyectar una peli.
La película elegida fue, para ir sobre seguro, The kid, (Chaplin), No podíamos arriesgarnos a que volviera a pasar lo del otro día, vino menos gente, pero la gente que estuvo, estuvo contenta y poco a poco fue viniendo más gente, aunque para nuestra sorpresa, a diferencia de Thanisandra, donde no pudimos oir mas risas y carcajadas, aquí la gente se aburrió un poco. Nos dimos cuenta de la diferencia social entre unos y otros, aquí en el barrio, hay una tele en cada casa, en el asentamiento, ni siquiera tienen electricidad en las casas, aquí están muy acostumbados a ver la tele cuando quieren y para captar su atención hace falta mucho más. De hecho, preguntándoles por sus sensaciones al final, nos dijeron que querían una peli en color.
Seguimos teniendo charlas discutiendo sobre el amor, las parejas y la vida con Bharathi y ahora también con Divya, le están preguntando a los demás sobre cosas que ella y yo ya hablamos, bien, cuantas más opiniones diferentes reciba, mejor.
9/02à Por la mañana bien temprano, a eso de las 5 llegaron nuestros compañeros desde Anantapur, y después de dormir algunas horas más y de hacer alguna que otra tarea relacionada con el proyecto cada uno de manera individual, entre duchas y desayunos, nos pusimos a preparar todo lo necesario para cocinar 6 tortillas de patata que llevar al asentamiento. Después de unas horas y de comernos una de ellas, hemos ido al asentamiento a compartir con ellos esta “spanish food”, ¿Y qué mejor manera de compartirlo que preparando una allí in situ? Con tres piedras, algo de leña, y una olla hemos hecho una allí mostrándole a todo el mundo como se hace, hemos modificado un poco la receta, básicamente en tres aspectos, cocinado con leña, hemos añadido algún que otro chile a la patata y cocinado en una sartén tipo wok, ya que, al parecer, no existen las sartenes ondas.
Nos hemos encontrado a menos gente de la que esperábamos, a pesar de ser domingo, mucha gente había ido a trabajar, como cualquier otro día.
Hemos echado de menos que ellos compartieran con nosotros algún plato de los que suelen cocinar, y cocinar juntos, pero ha merecido la pena cuando nos han ayudado con el fuego, a batir los huevos, y una familia nos ha ofrecido un plato de arroz con verduras que estaba picantemente delicioso. Muchos de ellos, sobre todo los niños, han estado pendientes en todo el proceso. Al acabar la tortilla, hemos repartido todas las tortillas troceadas. Les ha gustado, sobre todo la facilidad de hacerlas, pero no les ha gustado que el huevo se quede jugosito, o que no tuviera mucha sal. En general ha sido un muy buen rato.
Afrontamos una nueva semana llenos de ilusión, preparando y dándole las últimas pinceladas a lo que será el workshop, comprobando a cada rato si el contador de la plataforma de goteo ha subido, ya que estamos en los últimos días de la campaña para financiar el proyecto. Prediseñando lo que será la futura escuela (ya que el diseño final se decidirá en el workshop) y gestionando todo lo que tiene que ver con los materiales, los métodos constructivos, los colaboradores en la construcción….
Paso a paso se hace el camino y aquí va una frase que conviene recordar en estos momentos:
«No nos atrevemos a muchas cosas porque son difíciles, pero son difíciles porque no nos atrevemos a hacerlas.» – Séneca
Multihábitat India 